Enraizada (Reseña por Enrique Infante)
Enraizada
(Reseña)
Por Enrique Infante
Autora: Míriam Damaris Mardivino
Libro: Enraizada
Editorial: Valparaíso Editores
País: España / Puerto Rico (USA)
Género: Poesía
Enraizada es un festín de palabras, un telar de posibilidades cromáticas sin alharaca, una mirada introspectiva, pero en afrenta directa hacia un mundo inaprensible y cuadriculado, más bien plano.
Este primer libro de la escritora puertorriqueña Míriam Damaris Maldonado nos muestra, y sin muchas pretensiones, la raíz de todo su entorno, como si hubiese hecho un socavón en la tierra de sus entrañas y, ahí mismo, hubieran crecido las ramas de donde se sacaron las páginas con las que escribió este libro.
Hay en este poemario una intención muy clara de romper con lo establecido y con lo mal aprendido; luego, y de manera fehaciente, sentencia lo que ha vivido y ha tenido que pasar para edificar su propio espacio con voz ciertamente aguda, voz de barro, pueblo, lucha y cambio.
“… de tinta se me agota la sangre
esa que el viento grita
más pesada que el agua
se ha vuelto ácida, indomable.
Dibujada en la piel curtida
de experiencias pretéritas”.
A veces, con dudas humanas pero irónica, otras, descubriéndose en sus propias cavilaciones, pero siempre valiente, volátil por su entorno, cruda y sin reservas.
“… me gusta imaginarme divorciada
sostener la copa hasta quebrarla.
quién sabe si callar,
sangrar, o buscarme fragmentada…”
Luego, con arrojo e intrepidez, permuta y preserva:
“esta cuerpa
ritualizándose,
redescubriéndose,
vaciándose en la plenitud inmensa del reflejo.
Esta cuerpa de cicatrices recicladas
artificio de un sistema que te desgasta
nutriendo la sonrisa marchita
memorias fértiles que empoderan…”
Pocas veces uno se encuentra con versos sin pertenencia ni sumisión, sin estilo ni horma:
“Yo también enredé mis sombras en el patriarcado.
Escondí mi vientre lleno de miedos.
Destruí un mundo silente, pleno, al que pertenezco…”
Dividido en tres partes, para entender mejor este primer viaje poético de cincuenta y seis páginas surtidas de entrega, afrenta, denuncia, miedo y libertad en donde evoca sensorialmente cada uno de los espacios de arena y mar de su natal Puerto Rico, Míriam Damaris, seguramente, desprenderá muchas historias más. No es común encontrar tanta poesía irreverente en un mundo cegado por la efimeridad.